Cultura del Vino

Conservar el vino en casa

Conservar Vino en Casa

Conservar el vino en casa

Conservar el vino en casa es muy sencillo si dispones de vinos en vinoteca. Como ya sabrás, las variables importantes para conservar el vino en casa son: temperatura adecuada, ausencia de iluminación o al menos que ésta, no incida directamente sobre los vinos y humedad en porcentajes adecuados. De todo ello hemos hablado y explicado a modo de consejos. No obstante, la opción más rápida, más sencilla, más decorativa y más segura es elegir vinoteca en función de las necesidades y tipos de vinotecas  existentes en el mercado y pasar así por tanto a conservar el vino en casa de manera adecuada.

Cualquiera de nuestras vinotecas van a permitirte conservar el vino en casa en estado óptimo.  El motivo de que la humedad sea del 70% en las neveras para vinos  implica que se evite la contracción del tapón de corcho por baja intensidad relativa de ésta, y que por tanto pueda acceder más oxígeno del que la microoxigenación permita de manera natural.

La temperatura es otro de los factores clave. De manera que la cava climática o vinoteca permitirá una temperatura a través de su funcionamiento constante y controlada, hasta los 14 o 15 grados. Un poco más elevada si se trata de conservar el vino en casa para la guarda prolongada.

El posicionamiento de las botellas en horizontal no es otro que permitir el contacto del vino con el corcho, permitir la microoxigenación y la evolución madura del mismo. Estas deben estar completamente ausente de vibraciones, consiguiéndose con cualquiera de las vinotecas que enocave.es pone a su disposición. No menos importante la ausencia de olores no implícitos al vino. La vinoteca es armario climático para vinos. Existen cavas para el mantenimiento de otro tipo de productos como puros, por ejemplo.

El vino es un ser vivo, que nace, se desarrolla y que finalmente por el tiempo acaba muriendo. Pues bien, con una cava climática y nuestros consejos para guardar vinos podrás provocar que se desarrollen y que evolucionen constantemente, pudiéndose beber antes de que estos mueran.

Cuando una botella de vino es abierta, lo mejor es acabarla, bebiendo todo su contenido. Cuando esto no es posible, la mejor opción es cerrarla herméticamente con un tapón de presión y no con el mismo tapón de corcho ya que se inicia un proceso de oxigenación que puede afectar al aroma y al color de este. Además, si se utiliza el mismo tapón de corcho, el aire filtraría y desde luego no es la mejor opción. Algunos sedimentos podrían caer al líquido y es por lo que la opción más neutra y segura es usar tapones que presionen.

Existen accesorios que simulan bombas de vacío por el que es posible eliminar el aire que queda el botella una vez abierta, quedando herméticamente al vacío.  Si realizas esto, podrás disfrutar tu vino es perfecto estado durante un par de días, conservándolo en la vinoteca, por supuesto.

 

 

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